Una excepción

Me dice una buena amiga, sin duda con la mejor de las intenciones, que padezco la enfermedad de la melancolía que, según ella sabe, afecta a los artistas (al menos así se creyó en otros tiempos). No es más que un cumplido inmerecido por el que me sentiría halagado de no ser por que padezco otra enfermedad del alma, la hipocondría o, mejor dicho, la aprensión. Así que ahora tengo una nueva enfermedad que añadir a mi lista de susceptibles de padecer.

Por supuesto que bromeo, Churchill decia que un pesimista es aquel que ve una adversidad a cada oportunidad y un optimista el que ve una oportunidad en cada adversidad. Espero que la aprensión sea el único rasgo de pesimismo que me acompañe.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
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